Una de las características más notables de España es que se trata de un país que presenta tantas diferencias entre alguna de sus zonas que en ocasiones es difícil discernir si estamos hablando de nuestro propio territorio o no. En efecto, vivir en Madrid no es lo mismo que hacerlo en Badajoz o en Cáceres. Tampoco es lo mismo que hacerlo en las Canarias o en Bilbao. La diferencia entre unas y otras es tan grande que no nos extraña en absoluto que España sea un Estado federal.
Todos estos lugares se diferencian, en primera instancia, en lo geográfico de su paisaje. En segunda instancia, se diferencian en su clima, puesto que aunque en nuestro país prima el clima continental es bastante evidente que no es lo mismo un clima continental de Santander que uno de Madrid. Pero lo más significativo de las diferencias entre todas esas zonas son los aspectos culturales de la gente que las compone. Y es que España es uno de los países más multiculturales que podemos encontrar en el mundo.
La calidad de vida es otra de las cosas que más cambian entre las diferentes zonas que componen España. De entre ellas, hay una que destaca en buena medida. Hablamos de la provincia de Segovia, una de las que quizá no destaque por su número de habitantes pero que sí lo hace en lo relativo a la comodidad de la gente que la puebla. Los profesionales de Segohouse nos han comentado en fechas pasadas que uno de los motivos por los cuales muchas personas deciden acudir a vivir a Segovia es por la enorme sensación de tranquilidad que otorga vivir en un entorno tan privilegiado como este.
Un artículo publicado en el portal web El Adelantado hacía referencia a que Segovia es considerada como una de las 20 provincias españolas en las que mejor se vive, corroborando de este modo lo que venimos comentando en los párrafos anteriores. No cabe duda de que la vida en este entorno, mucho más tranquila y pausada que en otras zonas del país, hace que su gente esté bastante más acomodada que aquellas personas que, como por ejemplo las madrileñas, estén bastante más acostumbradas al ruido y al ajetreo.
Una ciudad encantadora
Segovia es uno de los encantos que puede ofrecer Castilla y León en lo que a turismo se refiere. En primer lugar porque el Alcázar y el Acueducto son auténticas joyas a nivel no solo regional sino nacional. Y en segunda instancia porque Segovia está también considerado como uno de los lugares en los que mejor se come de toda España. Los encantos de este lugar son variados y, desde luego, llaman la atención de cada día más personas. Eso explica el por qué de tanto turismo en la ciudad en los últimos años.
Cuando calidad de vida no es lo mismo que poder adquisitivo
Segovia es una ciudad que, como ya hemos contado, destaca por su buena calidad de vida. Pero eso no quiere decir que sea una de las ciudades o provincias que cuente con un mayor poder adquisitivo. De hecho, Castilla y León está bastante alejada de las primeras plazas de ese ranking. Pero esta comunidad, con Segovia a la cabeza, es la mayor prueba de que calidad de vida no siempre equivale a tener dinero. De hecho, las dos cosas no tienen nada que ver en un entorno como este.
Este es uno de los principales valores y ventajas de las personas que viven en Segovia, además de lo acogedores que son por regla general. Aunque lo cierto es que hace un poco de frío, eso no importa cuando se descubre un lugar como este con personas como estas. Todas estas cosas explican el orgullo de pertenencia a esta tierra y también el por qué de que tanta gente esté deseando visitarla. Y no es para menos. Quizá no sea la provincia más próspera y con más empleo de España. Pero que es maravillosa está fuera de toda duda.
Lo mejor de todo es que la manera de ser de la ciudad y sus habitantes es uno de los motivos que nos hacen pensar que Segovia va a seguir siendo una ciudad de referencia en lo que al turismo de interior español se refiere en los próximos años. Este es uno de los lugares en los que tenemos más claro que la procedencia importa. Segovia, esa mezcla de tradición y modernidad, seguirá siendo una ciudad ideal a la que acudir y de la que disfrutar. Apuntadla en vuestras agendas. Seguro que no os va a defraudar a ninguna de las personas que habéis leído estas líneas.