Tras un mes de septiembre marcado por la vuelta al cole de los niños, con la cantidad de libros por cabeza que supone este fenómeno, se ha publicado una reciente noticia que confirma el buen estado del sector del libro en España. Este sector ha sufrido un varapalo muy grande durante la crisis, de hecho, se bajó desde una facturación de 3.180 millones de euros en 2008 a 2.180 en 2015, lo que supone una pérdida del orden del 31%.
Aun así, las editoriales han mantenido el pulso y han seguido manteniendo la edición de nuevos títulos. La edición de nuevos títulos apenas bajó un 5,7% entre 2011 y 2015, a pesar de ser estos títulos menos rentables de lo que eran. Este bajón, además de afectar a las editoriales, abatió con crudeza a los intermediarios.
Un ejemplo de editorial que ha estado al pie del cañón publicando libros durante la crisis es Ediciones Aljibe, referente en publicaciones de temática educativa, especialmente en la atención a las Necesidades Educativas Especiales, y que ha publicado a más de 450 autores, contando con un catálogo de más de 600 títulos vivos de diferente temática.
Por ejemplo, las ventas en las librerías cayeron casi un 23% en solo cuatro años, cayendo de sde los 1.028 millones de euros de 2011 a los 788 millones de euros de 2015. En el caso de los hipermercados cayeron un 32%, y sorprende que la venta por Internet se mantuvo estancada en torno a 20,2%.
Las consecuencias de este bajón en el sector fueron muy severas, ya que provocaron el cierre de empresas, aunque también se crearon otras nuevas orientadas a la edición o venta digital. Cabe mencionar que muchas editoriales no quebraron, sino que en su lugar fueron absorbidas por las editoriales de primera línea.
Las causas del crecimiento
El sector del libro ha tenido que buscar soluciones a sus problemas, y esto lo ha hecho ganando cuota y reduciendo costes para adaptarse al nuevo funcionamiento del sector, que está orientándose a la venta por la vía digital y escrita. La mayoría de títulos ya se digitaliza, y en 2015 se editaron 44.209 títulos en formato digital, existiendo un stock de 171.000 títulos en formato digital.
Pero los costes derivados de la digitalización son todavía difíciles de amortizar, porque el formato es aún muy minoritario, y también las descargas ilegales hacen mucho daño. Aun así sus ventas han crecido de 80 a 115 millones entre 2013 y 2015, lo que supone un porcentaje del 44%, que no es tan importante como parece por suponer únicamente el 5,1% de las ventas totales del sector.
Esta convivencia del formato físico con el formato electrónico va a continuar, siendo el formato electrónico el que vaya cogiendo terreno al formato digital, aunque todavía queda mucho recorrido en España para que crezca el libro electrónico. Se ha conseguido tumbar la idea de que las grandes empresas tecnológicas tumbarían a las empresas tradicionales.
En conclusión, vemos cómo el sector del libro está remontando y goza de buen estado debido a su capacidad de adaptación al mercado.