Es preciso olvidarse de cómo se han llevado a cabo las estrategias de marketing empresarial hasta la fecha. Muchas empresas han decidido, desde hace algunos años, focalizar su atención en desarrollar dichas estrategias para Internet o las nuevas tecnologías y también a través de medios tradicionales como la radio, los periódicos de papel e incluso la televisión. La sociedad del futuro implica, no obstante, centrarse al cien por cien en las estrategias que tengan que ver con esas nuevas tecnologías de las que hablamos. Sin que haya sitio para los medios de comunicación tradicionales.
Los datos de audiencias revelan una realidad más que evidente: la radio y los periódicos en papel solo pierden oyentes y lectores. La televisión sí que es verdad que mantiene su share, pero cada vez es más consumida a través de Internet. Todo esto no hace sino respaldar la idea con la que se ha abierto este artículo: hay que desarrollar todo lo relacionado con nuestra empresa en Internet si se quiere tener éxito. Cualquier otra vía implicará pérdidas.
Hace años que regento una empresa dedicada al asesoramiento legal y económico de otras entidades. Tanto yo como mis empleados tenemos una experiencia en el sector muy dilatada, lo que nos hace idóneos para ayudar a cualquier tipo de cliente que solicite nuestros servicios. No obstante, y teniendo en cuenta que vivimos en el siglo XXI, hemos sido consientes en todo momento de que con ser los mejores no basta. También hay que decirlo.
Con ese objetivo siempre en mente, la empresa ha lanzado infinidad de campañas de marketing a través de diferentes medios de comunicación y siguiendo las directrices de varias agencias publicitarias. Eso funcionó durante algún tiempo. Pero a medida que se iba acercando el final de la década pasada, esta estrategia comenzó a diluirse junto con buena parte de nuestros beneficios.
Había que cambiar de mentalidad y desde la Dirección de la empresa lo sabíamos. Aunque ya habíamos comenzado a operar en un medio como Internet, todavía no lo hacíamos con la fluidez y la constancia con la que ya sí que trabajaban otras empresas de la competencia. Teníamos que equipararnos en ese sentido y para ello teníamos varias necesidades, entre las que se encontraban diseñar de una manera más usable y accesible nuestra página web y posicionarla lo mejor posible para que buscadores como Google nos la colocaran entre las opciones destacadas para todo aquel que deseara encontrar asesoramiento en materia legal y económica. Nuestro futuro pasaba claramente por ello.
Fue por todo esto por lo que comenzamos a buscar una empresa que nos echara un cable en el asunto. E-ingenia era sin duda la más indicada para ello. Los modernos y útiles diseños para web que efectuaba y el gran posicionamiento SEO que conseguía imprimirle a sus clientes eran argumentos más que de sobra para ello. Se trataba de una alternativa más que decente para convertir en realidad nuestras aspiraciones.
Convirtiéndonos al marketing digital
Trabajar con E-ingenia solo implicó ventajas para nuestros intereses. Conseguimos en un corto periodo de tiempo montar una web mucho más acorde a las necesidades de una empresa en el contexto actual. Además, los profesionales de aquella entidad hicieron de nuestro portal web un sitio equipado con todas las características requeridas para estar bien posicionado en los diferentes buscadores web.
El cambio se notó. Vaya que si se notó. Pronto comenzamos a recibir los primeros datos de visitas en la página, los cuales se habían multiplicado por 3 en un periodo de tiempo inferior a dos meses. Además, los registros económicos de la empresa se revirtieron y comenzamos a protagonizar unos números que hacía tiempo que habíamos perdido de vista. Era la prueba de que algo estábamos haciendo bien. Algo que hemos mantenido durante todos estos años y que nos permiten decir con orgullo que somos una empresa de referencia en nuestro sector.