A la hora de elegir un textil se debe tener en cuenta la finalidad o uso que va a tener. Porque no es lo mismo escoger una tela para una cortina que para tapizar una silla. Por eso en este artículo vamos a descubrir cómo deben ser los textiles que se van a utilizar en tapicería y os vamos a dar algunos trucos para elegirlos.
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Debe ser resistente
Una de las principales características que debe tener un textil que se vaya a utilizar para tapicería es que debe ser muy resistente. “Los textiles para tapicería deben ser resistentes para garantizar que sean duraderos. Pero hay una amplia variedad de tejidos gruesos y resistentes especialmente diseñados para esta finalidad. Se pueden encontrar tejidos originales, con un amplio abanico de colores y estampados”, explican desde Rioma, empresa fabricante de telas y tejidos con más de 40 años de experiencia.
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Es recomendable que sea lavable
También hay que tener en cuenta que es recomendable escoger un tejido que sea lavable. Y es que normalmente se suelen tapizar muebles de uso diario como mesas de comedor, sillones o sofás. Unos muebles en los que además es bastante común comer y que por lo tanto están expuestos a cualquier tipo de mancha.
Y por ello es recomendable que sean lavables para que en el caso de que se ensucien se puedan eliminar las manchas con facilidad. De esta manera se estará apostando por la durabilidad del tejido. Porque nadie quiere tapizar un mueble y volver a tener que hacerlo al poco tiempo.
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Los materiales más recomendados
Existen diferentes materiales que se recomiendan para tejidos que se van a utilizar en tapicería. Así, se emplean tanto textiles elaborados con fibras naturales como tejidos sintéticos.
Respecto a los tejidos naturales se recomienda el uso de algodón o de lana. El algodón es una buena opción para tapicería porque ofrece una buena relación calidad precio, además de que es resistente, duradero y proporciona un tacto agradable a los muebles tapizados. Mientras que la lana es duradera y robusta, así como es más fácil eliminar las manchas de este tejido que en el algodón. Pero aunque la lana y el algodón sean los textiles naturales más empleados para tapicería muchas personas también utilizan seda y lino. Principalmente porque estos tejidos ofrecen una estética más glamurosa, pero no se recomiendan para nada para muebles de uso diario porque son tejidos mucho más delicados.
Respecto a los tejidos sintéticos que más se emplean en tapicería hay que nombrar el poliéster y el tejido acrílico. El poliéster se emplea especialmente en tapicería para exteriores y se suele combinar con algodón. Y el tejido acrílico, que es un textil que se elabora a partir de productos derivados del petróleo, suele imitar la lana aunque ofrece características diferentes a la fibra natural. Por ejemplo, el aspecto estético entre el acrílico y la lana es muy similar, aunque el acrílico es un material mucho más suave y su cuidado es mucho más simple que el de la lana. Por eso el acrílico se emplea para tapizar muebles que necesitan ser más resistentes como los exteriores.
No obstante, el tejido que más se suele emplear para tapicería es la chenilla. Este tipo de tejido tiene un aspecto aterciopelado, un tacto muy suave, una apariencia voluminosa y una gran resistencia. Todas estas características hacen que se use mucho en tapicería, pero también en decoración.
Hay que indicar que la chenilla se elabora con diferentes materiales. Así dependiendo del tipo de tejido, puede ser 100% algodón, 100% poliéster, 100% rayón o una mezcla de estos materiales. En función de la proporción de cada material las características pueden variar un poco, pero fundamentalmente sólo cambia un poco el grosor.
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Diseño y estética
Por supuesto, a la hora de elegir cualquier tipo de material también hay que tener en cuenta el color, el estampado o el diseño. Pero como ya hemos señalado anteriormente en el mercado se puede encontrar una amplia gama de materiales especialmente indicados para tapizar muebles. Por lo que las variables a tener en cuenta sobre el diseño y la estética de los textiles dependerán de tus gustos particulares, el mueble en cuestión o la decoración del resto de la estancia en la que quieres colocar la pieza tapizada.
Estas son las principales cuestiones a tener en cuenta a la hora de elegir un tejido para tapizar muebles. Pero en caso de duda siempre puedes consultar a un profesional que te recomendará el mejor textil en función de tus necesidades y presupuesto.
