Es el momento de que nos tomemos en serio todo lo que tiene que ver con el cuidado de nuestro medioambiente. Llevamos años advirtiendo de los problemas que rodean a nuestro planeta, pero es evidente que todavía falta un recorrido tremendo para intentar cambiar muchos de los malos hábitos que tenemos los seres humanos a ese respecto. Seguimos contaminando nuestro entorno y ese es un problema que debemos corregir a la máxima brevedad posible. Si no es así, está claro que vamos a pagar las consecuencias más pronto que tarde. Ya lo estamos haciendo.
Dicho esto, es de justicia reconocer que se está produciendo un cambio paulatino en todo lo que tiene que ver con la ecología. Hemos apostado por las energías renovables, por el reciclaje, por la eliminación de un buen porcentaje de la cantidad de combustibles fósiles que se consumen a lo largo de cada año y por una mejora de nuestras costumbres en materia de respeto por el medioambiente. Pero debemos hacer todavía más. Como hemos dicho más arriba, queda un largo camino por recorrer y es mejor empezarlo cuanto antes. Eso es lo único que puede garantizar una mejor salud para el planeta.
Uno de los campos en los que venimos mejorando de un modo más considerable es en la alimentación. La gente está apostando por productos ecológicos a la hora de mejorar la alimentación propia y la de las personas que se encuentran a su alrededor, así que es lógico que exista un mayor respeto por la Tierra desde ámbitos como la ganadería o la agricultura. Sin duda, trabajar desde diferentes ámbitos es fundamental para conseguir los objetivos por los que venimos trabajando en los últimos años. Sin duda, sería imprescindible avanzar en todos los campos para obtener beneficios medioambientales más pronto que tarde.
Según una noticia que fue publicada en la página web Financial Food, el consumo de alimentos ecológicos ha crecido en España en un 7’7%. La noticia, que es del mes de marzo del año 2021, muestra una tendencia al alza en el consumo de un tipo de alimentos que no solo son de gran utilidad para el cuidado de nuestra Tierra, sino también de una enorme relevancia para la conservación de un buen estado de salud personal en cada uno de nosotros y nosotras. ¿Hay algo que merezca más la pena que eso? Nosotros creemos que no.
Los especialistas en alimentación se vienen dando cuenta del crecimiento de la demanda de alimentos ecológicos en los últimos años. En Rincón del Segura, donde puedes comprar productos como pan integral de espelta y harinas ecológicas entre otros, nos han indicado que esta tendencia se ha extendido a todos los ámbitos de la alimentación, incluyendo el de la panadería. Sin duda, hablamos de una noticia que es realmente buena y que esperamos que siga vigente de cara a los próximos años. La calidad de vida y el bienestar de las personas crecería de una manera sustancial y más si la ecología forma parte de productos alimenticios tan habituales como los que son propios de una panadería.
Una tendencia que no solo afecta a los productos de alimentación
El alto impacto que viene teniendo la ecología en nuestras vidas en los últimos años está haciendo posible que mejoren muchas cosas en nuestra vida día a día. No es algo que tenga que ver solamente con la alimentación, sino también con otro tipo de productos. A fin de cuentas, la lucha por la mejora del estado de nuestro salud de nuestra tierra es una lucha transversal y que atañe a todos y cada uno de los ámbitos de actuación del ser humano.
En una noticia distribuida por La Moncloa, el gasto en productos ecológicos en el interior de nuestras fronteras se incrementó en el año 2021 en un 7%. Hablamos ya no solo de alimentos, sino de productos de todo tipo, lo que maximiza todos esos beneficios que se derivan de uso de productos en cuya fabricación se prioriza todo lo que tenga que ver con el respeto por el medioambiente. Ni que decir tiene que debemos hacer todo lo que esté en nuestras manos para conseguir que esto siga siendo tan real como la vida misma y que crezca la demanda de productos como estos.
Hay que trabajar mucho para conseguir mejoras sustanciales en el estado de salud de nuestra Tierra. Es cierto que está creciendo el trabajo que viene desempeñando la sociedad en este sentido en los últimos años, pero… ¿es suficiente? Está claro que no del todo. Debemos seguir haciendo posible que las empresas, las personas y las administraciones públicas sigan contribuyendo a mejorar todo lo que tenga que ver con este asunto. Si no es así, nos terminaremos arrepintiendo más pronto que tarde. Tenemos que evitar esto a toda costa.