Sabemos que el turismo es una de las grandes fuentes de riqueza de nuestro país y que este es uno de los sectores que nos permite estar bajo la mirada de toda la comunidad internacional, deseosa como se encuentra ella de desplazarse hasta alguna de nuestras ciudades y municipios para vivir unas vacaciones de ensueño. En efecto, tenemos la gran suerte de ser un destino turístico para prácticamente cualquier tipo de persona: amantes de la playa, el sol o el calor, amantes de la montaña, amantes de la Historia y amantes de la gastronomía.
Es cierto que hay un modelo de turismo que destaca por encima del resto, que es el turismo de sol y playa. En cierta medida, es lógico que así sea teniendo en cuenta la calidad de las playas de nuestro país y las buenas temperaturas que se registran en la costa mediterránea o en Canarias. Sin embargo, España tiene muchos más secretos que esos y hay zonas en las que, a pesar de no haber playa, existen secretos que merece la pena descubrir. Una de ellas es la región de Extremadura, a la que queremos dedicar los párrafos que podréis leer a continuación.
En una noticia publicada este mismo año por El Periódico de Extremadura se indicaba que, en el primer trimestre de 2023, la ciudad de Cáceres había vuelto a batir otro récord turístico al superarse la cifra de 20.000 visitantes. Además, y como los buenos datos tampoco vienen solos, también se llegó a la conclusión de que la estancia media había subido hasta las 1’77 noches. Sin duda, se trata de noticias muy positivas para una región que la gente no suele tener demasiado en cuenta a la hora de hablar de turismo pero que se va posicionando poco a poco en este campo.
¿Por qué está viajando la gente a una ciudad como esta? Hay otra noticia, más antigua, que nos puede proporcionar una explicación o, al menos, aproximarse a ella. Se trata de una información vertida por el diario 20 Minutos que indica que el visitante de Extremadura escoge esta región para descansar, para encontrar esa paz y tranquilidad que quizá no exista en el lugar en el que reside habitualmente. Por otro lado, estos visitantes destacan la amabilidad de los extremeños y extremeñas, algo que sin duda también es fundamental para conseguir la atención de la gente.
Que Extremadura empieza a ser un destino turístico destacable es algo que nadie se atreve ya a dudar y que está haciendo que la región crezca económicamente gracias a la creación de empresas relacionadas con este sector. La cantidad de llamadas, emails y reservas que gestionan desde Idiomatur, que va creciendo con el paso de cada año, es un buen ejemplo de ello y viene a confirmar que las provincias de Cáceres y Badajoz están buscando (y encontrando) su sitio en lo que tiene que ver con esta actividad, especialmente desde que finalizó la pandemia.
Proponer actividades nuevas y originales, clave
Si, además, la región en la que se está potenciando el turismo ofrece actividades que sean originales, las posibilidades de crecer se multiplican por mil. En el caso de Extremadura, una de las acciones que funcionan muy bien son las gymkanas turísticas, que además sirven para ampliar nuestros conocimientos y nuestra cultura sobre una zona como lo es esta. Las inmersiones lingüísticas también se encuentran a la orden del día y también tienen la capacidad de llamar la atención de la gente de una manera muy poderosa. Ambas actividades tienen gran parte de la culpa de que Extremadura viva sus mejores días en lo que a turismo se refiere.
Con el paso de los meses, Extremadura se va afianzando en una muy buena posición en lo que a turismo se refiere. La necesidad que tiene la gente de encontrar silencio y las buenas ofertas que proporciona la región en este sentido se traducen en miles de reservas y lo cierto es que no nos extraña en absoluto. De hecho, la sensación que tenemos es la de que va a seguir creciendo la cantidad de personas que vean con buenos ojos pasar, al menos, un fin de semana en esta tierra. Es una de esas cosas que hay que hacer antes de morir.
Como decíamos al principio, España tiene muchos más lugares interesantes de los que creemos. Y debemos sacar el máximo partido de ello. Somos algo más que sol y playa. Y esa es una bendición que no cabe duda de que va a deparar muy buenas noticias para la economía y el turismo nacional. Ya lo está haciendo, desde luego, así que nos tenemos que congratular por ello y trabajar para que se mantenga todo lo que tiene que ver con esto.